Distribuidora de analgésicos
¡Qué alivio sentimos cuando no estamos bien, tomar un analgésico!, pero realmente sabemos ¿cómo llegan los analgésicos a las farmacias, todos los días?, ¿cuál tomar, y en que proporción? De este tema en particular, nos vamos a dedicar a explicar en el presente artículo, más precisamente de la distribuidora de analgésicos, para que sepamos cómo se efectúan los pedidos, y cómo la cadena de consumo y de distribución trabaja. En principio, tendremos que explicar qué es un analgésico, para que sirven y quienes dan las ordenes para que los tomemos, cuánto y en qué equilibrio. Los analgésicos, son medicamentos que deben ser recetados por los médicos a los que concurrimos cuando algo en nuestro organismo no está bien. Solo los debemos comprar en las farmacias, y no en cualquier kiosco o maxi kiosco de paso, eso jamás, podría tratarse de medicamentos inadecuados, y mucho peor si no nos lo han recetado los médicos.
Existe una legislación para este tipo de ventas ilegales, es decir que ningún kiosco, o maxi kiosco, podrá vender más analgésicos, o medicamentos a los consumidores, porque esto es exclusividad de las farmacias, bajo recetas o de venta libre.
Un distribuidora de analgésicos, nunca venderá sus productos a los kiosco, o drugstores, solamente se ocupan de hacer llegar los medicamentos a las farmacias, para su venta, y los comerciantes farmacéuticos, son los únicos que nos las deben vender, a los precios según el vademecum de farmacología, de los laboratorios. Los analgésicos, se toman en varias oportunidades, por ejemplo cuando nos han operado, por dolores intensos de muelas, o de huesos, dolores corporales, o torceduras, malas posiciones, accidentes, cuando hay cuadros de resfríos, y malestares, etcétera, pero es el médico de cabecera el que nos lo recetará, para que nosotros los compremos en las farmacias.
Los analgésicos, contienen drogas, que sus principios activos nos alivian en nuestros dolores, pero no todos son iguales y están confeccionados para las mismas cosas, porque de ese modo habría uno o dos a lo sumo y todo el mundo tomaría esos. Pero en la realidad no ocurre así, hay analgésicos para cada dolencia, para cada enfermedad, que tiene más o menos químicos para una cosa y no para otra, así que la toma de conciencia, es por parte de nosotros también en no caer en la tentación de automedicarnos, y menos comprar medicamentos truchos en los kioscos, porque esta práctica podría ser peor.
Una distribuidora de analgésicos, entrega sus medicamentos a las farmacias de las zonas en la que tienen lugar sus actividades, y estas son las droguerías que son los establecimientos que están destinados a la distribución de medicamentos, pañales descartables, elementos de ortopedia, belleza y perfumería, y todo lo que encontramos en las farmacias. Las empresas farmacéuticas, son las encargadas de confeccionar los remedios, medicamentos, drogas, y analgésicos para que la población compre para su uso personal, estos establecimientos, reciben el nombre de laboratorios que tienen nombre y trayectoria, los que venden sus producciones a las distribuidoras o droguerías, para ser distribuídos en las farmacias de las zonas estipuladas.
Existen analgésicos para bebes, niños pequeños, para mujeres, para embarazadas, para hombres y para diferentes dolencias, así no es lo mismo que un analgésico sea recetado para el organismo femenino, que para el de un bebe, de ninguna manera, es por ello que estos deben ser solamente recetados para la oportunidad que sea. Aunque se trate de un analgésico de venta libre. Hay que tener cuidado con esto puntualmente, por eso es que cada tanto hay campañas destinadas a la orientación del consumidor para que tome conciencia de su propia salud. Así que un medicamento tan sencillo como un analgésico para calmar nuestro dolor, llega a las distribuidoras de analgésicos, a partir de los pedidos de las farmacias adheridas a ellos, para su posterior venta en ellas.
En la actualidad, los pedidos se hacen a través de Internet, por medio del correo electrónico, y la comunicación es fluida para que la actividad se agilice, a diferencia del pasado, que era por teléfono, con lo cual muchas veces dificultaba el trabajo, porque los olvidos o los malos entendidos, eran cosa de todos los días.
Así los empleados de las farmacias autorizadas a la venta de medicamentos, drogas y otros artículos, hacen los pedidos a las distribuidoras de analgésicos, para que el pedido llegue en tiempo y forma, y eso es en veinticuatro horas. Aquí también la compra es al por mayor, con su factura y remito, como hemos visto en otras oportunidades de otros comercios, el precio por unidad comprada, que lógicamente es inferior al del precio del consumidor final o público. De esta manera, ponemos fin a la explicación completa de las actividades de las distribuidoras de analgésicos, que son los mayoristas de medicamentos, los que poseen establecimientos para el almacenamiento y conservación de remedios para una población.